jueves, 14 de mayo de 2015

En la Voluntad de Dios




15 Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios,
16 aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos.
17 Por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor.

Para hacernos servidores útiles en su reino, Dios destruirá nuestra terquedad, nuestra vena independiente que pone al "yo" primero. Él no quiere destruirnos; solamente quiere transformar lo que nos impide ser un reflejo de Jesucristo.

Nuestro Padre celestial ve lo que somos realmente, y por eso apunta a las áreas de nuestra vida que estorban en nuestro crecimiento como cristiano. Las actitudes de orgullo, envidia, ira y falta de perdón deben ser enfrentadas para que el amor y la verdad de Dios fluyan a los demás por medio de nosotros. Efesios 4:31,32 Para generar el cambio, Él nos disciplinará severamente y mantendrá la presión hasta que respondamos.

El Señor desea lo mejor para nosotros, y hará lo necesario para producir una transformación en nuestros pensamientos, actitudes, acciones y prioridades.

Bendiciones y hasta pronto

No hay comentarios: