lunes, 27 de abril de 2015

La Obra Del Hijo De Dios







Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él.

La salvación se hizo posible por la perfecta obra del Hijo de Dios al morir en nuestro lugar.

La muerte del santo Hijo de Dios en la fría y dura Cruz del Calvario, es la garantía absoluta de la seguridad eterna del creyente.


La Cruz es la respuesta a la demanda de la paga del pecado que se menciona en el primer libro de la Biblia cuando el Dios Todo poderoso, pronuncio el mandamiento prohibitivo de no comer del albor de la ciencia del bien y del mal. Génesis 2:17;Romanos 6:23

Entonces podemos entender claramente que la muerte expiatoria  de Cristo es la respuesta absoluta a la demanda del mandamiento escritural; por otro lado satisface el poder condenatorio del pecado Romanos 8:34.

Ahora bien. Cuando se alega que el creyente en Cristo puede perderse, generalmente se hace sobre la base de algún posible pecado, puesto que el pecado nos separa de Dios. Romanos 3:23 Esta suposición necesariamente procede del supuesto caso en que Cristo no llevo todos los pecados que el creyente cometa Colosenses 2:13, y que Dios, habiendo salvado un alma, puede verse sorprendido y desengañado por un pecado inesperado cometido después de la salvación. 

Mi querido amigo y hermano Dios es Omnisciente y Omnipresente Salmos 139:1. Él es perfecto. El conoce de antemano todo pecado o pensamiento secreto que pueda oscurecer la vida de un creyente más aun la sangre expiatoria y suficiente de Cristo fue derramada por aquellos pecados del pasado, presente y futuro, por otro lado Cristo satisfizo la demanda del Padre Eterno al Morir en el lugar del pecador Romanos 5:8  ósea la sangre de Cristo fue suficiente para la propiciación de nuestros pecados 1 Juan 2:2

Gracias a la sangre, que alcanza para los creyentes  y no creyentes, Dios está en libertad de continuar su gracia salvadora hacia los que no tienen méritos. El los guarda para siempre, no por amor a ellos solamente, sino para satisfacer su propio amor y manifestar su propia gracia Romanos 5:8; Efesios 2:7, 10

En fin toda condenación es quitada para siempre por el hecho de que la salvación y la preservación dependen única y exclusivamente del perfecto Sacrificio del Unigénito Hijo de Dios Juan 3:18; 5:24;Romanos 8:1;1 Corintios 11:31,32.

Bendiciones y hasta pronto

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